Un lipoma es un bulto de grasa que, regularmente, aparece entre la piel y la capa muscular oculta. De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, “se siente pastoso y, por lo general, no duele, se mueve con facilidad al presionarlo ligeramente con los dedos”.
Es un bulto de grasa de crecimiento lento y no es cáncer. “Es un crecimiento benigno de células de tejido adiposo”, menciona Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Algunas personas suelen tener más de uno en el cuerpo y son detectados en la adultez. Esta afección es inofensiva y no es una condición médica grave. Para su tratamiento lo que recomiendan los expertos es extirparlo.
Los lugares más comunes en los que suelen aparecer estas bolas de grasa son el cuello, los hombros, la espalda, el abdomen, los brazos y muslos. Su tamaño es pequeño, generalmente, miden menos de cinco centímetros de diámetro y en algunos casos, pueden crecer más y causar dolor, debido a que presionan los nervios cercanos.
La medicina aún desconoce la causa exacta de la formación de los lipomas. No obstante, algunos factores genéticos pueden influir en su desarrollo. Aunque aparecen en la edad adulta, las personas que tienen entre 40 y 60 años de edad son más propensas a tenerlos, señala Mayo Clinic.
Los lipomas no necesitan un tratamiento inmediato o complejo. Para quienes significa una incomodidad existen dos opciones médicas a las que se puede recurrir: extracción quirúrgica o liposucción. En la primera, se extrae mediante un corte y la segunda, con una aguja y jeringa.